BUDAPEST, Hungría.-El papa Francisco instó a Hungría ayer a “extender sus brazos hacia todos”, en una crítica velada a las políticas del primer ministro Viktor Orban contra los migrantes, al iniciar el pontífice una visita de cuatro días a Europa Central, su primera gran salida internacional desde que se sometió a una cirugía intestinal en julio.
El papa solo pasó siete horas en Budapest antes de trasladarse ayer por la tarde a una gira de cuatro días por la vecina Eslovaquia.
Francisco, de 84 años, se mostró de buen humor durante su corta visita a Budapest, donde presidió una larga misa, y luego permaneció de pie y saludó a la multitud durante el recorrido en el papamóvil.
Usó un carrito de golf para no caminar largas distancias y confesó en un momento que tuvo que sentarse porque “ya no tiene 15 años”.
En Budapest, el papa Francisco ofició la misa de clausura de la conferencia internacional sobre la eucaristía.
Los organizadores prevían una asistencia de hasta 75.000 personas en la misa en la Plaza de los Héroes que se efectuó bajo pocas restricciones, pese a la expansión del coronavirus.
Fuente: El Día.